Nutrición inteligente

Vitaminas y Minerales
Las vitaminas y los minerales contribuyen a un mayor bienestar general, a estar más activo y a un control saludable del peso. Son esenciales para que el organismo crezca y se desarrolle con normalidad.
Incluso pequeñas deficiencias pueden causar daños. Debido a la alimentación deficiente, al estilo de vida ajetreado y a la polución, quizá necesite complementar su dieta con vitaminas y minerales para alcanzar su Cantidad Diaria Recomendada (CDR).
Las vitaminas nos ayudan a obtener energía de los alimentos y facilitan el crecimiento y ayudan al mantenimiento de la piel, los huesos y los músculos.
Existen 17 minerales como el calcio, el hierro y el magnesio que debemos obtener de nuestra alimentación ya que el cuerpo no los puede producir.
Es importante que incluya en su dieta diaria comidas variadas y equilibradas. Si le resulta difícil conseguir el equilibrio adecuado, un complejo multivitamínico diario como el Fórmula 2 Complejo Multivitamínico de Herbalife puede ayudarle a alcanzar su CDR.

Le será más sencillo alcanzar la cantidad de calcio que necesita cada día con Xtra-Cal.

Comer bien

Los Ácidos Grasos Omega-3 y Omega-6 
Los términos 'omega-3' y 'omega-6' se refieren a la estructura química de los ácidos grasos, y en la comida que ingerimos, hay un gran número de ácidos grasos omega-3 y omega-6, no sólo uno. Dentro de cada grupo hay ácidos grasos 'esenciales' que nos resultan necesarios ya que nuestro organismo no produce la cantidad suficiente. En pequeñas cantidades, con el equilibrio correcto, los ácidos grasos esenciales sirven para ayudar en el crecimiento, la vista y la función cerebral. 

El problema es que no podemos encontrar el equilibrio en nuestra dieta. Nuestros alimentos están sobrecargados de ácidos grasos omega-6 y no tenemos suficiente omega-3. Cuando no hay equilibrio, nuestra salud se puede resentir. Esto no ha sido siempre así ya que la dieta de nuestros ancestros contenía el correcto balance de ácidos grasos procedentes de alimentos de origen vegetal, como verduras, frutas, semillas y frutos secos. Pero en los últimos 150 años, nuestros alimentos ha cambiado mucho ya que ahora comemos unas 15 veces más ácidos grasos omega-6 que omega-3, lo que indica que no hay equilibrio. 
Uno los mayores factores que han contribuido en este desequilibrio es la enorme cantidad de aceites de origen vegetal que consumimos, especialmente el aceite de maíz, una de las fuentes con más contenido de grasas omega-6. Estamos saturados de ácidos grasos omega-6 procedentes de alimentos fritos, horneados, patatas fritas, aderezos de ensaladas y dulces, y al mismo tiempo, no estamos comiendo la suficiente cantidad de ácidos grasos omega-3, especialmente procedentes del pescado pero también de las verduras y los frutos secos.

Reduciendo simplemente la cantidad total de grasas que ingerimos ayudará a cambiar este desequilibrio, empezando por los alimentos grasos que comemos, que son las fuentes primarias del omega-6 en la dieta. Después hay que intentar comer más pescado. Si su dieta no incluye pescado varios días a la semana, debería considerar tomar un suplemente de aceite de pescado.  

Las frutas y verduras, de forma natural, contienen el equilibrio adecuado de ácidos grasos por lo que debería incluir fruta en cada comida. Las frutas tienen grasas mayormente en su semilla, así que aquellas con semillas comestibles, como las bayas y los kiwis, son una buena fuente de estas grasas saludables. Piense también en los frutos secos como aperitivo. Pueden ser un gran sutituto a las patatas fritas y galletas saladas, y pueden contener omega-6.

7 formas de motivarse para hacer ejercicio

Ya le han explicado los beneficios de hacer ejercicio una y mil veces y también sabe qué debería hacer, pero es tan fácil poner excusas. "Se está tan agusto en el sofá", "Ponen mi programa de televisión favorito" o "Hace tan mal tiempo".
Ya hemos escuchado antes todas estas excusas, así que, ¿cómo conseguir (y mantener) la motivación para levantarse y empezar a hacer ejercicio con regularidad?
  1. Plan.
    Llevar un estilo de vida ajetreado puede complicar el pensar en dejar un espacio para la práctica de ejercicio diario. Convierta el ejercicio en una prioridad y planifique después su rutina diaria. No lo deje como opción. Una vez planificado el ejercicio, empezará a disfrutar practicándolo. Por ejemplo, si le resulta difícil levantarse de la cama por las mañanas, no trate de hacer ejercicio en ese momento, pruebe a la hora de la comida o después del trabajo.
  2. Prepárese bien.
    El primer paso, con frecuencia el más difícil, es ponerse el chandal y las deportivas. Una vez vestido le resultará mucho más fácil ponerse en marcha. Disfrútelo como una novedad. Es sorprendente cómo un nuevo par de zapatillas para correr, una nueva equipación o cualquier aparato o complemento pueden animarle a "empezar a usarlo". Además de que verse y sentirse estupendo. 
  3. La variedad es fundamental.
    Cuando salga a correr o a montar en bicicleta, cambie la ruta. Si nada y el tiempo acompaña, hágalo en una piscina al aire libre en vez de en una cubierta. Mantenga el interés por cambiar de ejercicios cuando entrena para no aburrirse. El gimnasio se puede convertir rápidamente en algo tedioso, así que, si es asiduo a un gimnasio, intente practicar actividades al aire libre de forma ocasional.
  4. Hágalo social.
    Haga ejercicio con sus amigos, páselo bien y se mantendrán motivados mutuamente. Recibirá su apoyo y obtendrá resultados positivos, ¡haga que sea una experiencia divertida! Como alternativa, pruebe las clases de fitness en grupo o únase a un equipo de su localidad. Si intenta competir, participar con equipos deportivos es ideal. Como lo es hacer ejercicio con alguien mejor que usted ya que le estaría obligando a dar más de sí para mantenerse al día.
  5. El arte de la distracción.
    Hacer ejercicio mientras escucha música o charla con los amigos le mantendrá distraído. Probablemente se dará cuenta de que hará ejercicio durante más tiempo o de que terminará más rápido de lo que pensaba. Si está en casa, trate de hacer ejercicio mientras mira televisión o durante la pausa de publicidad.
  6. Establezca metas realistas.
    Es posible que no planee correr una maratón aunque es importante tener metas y llevarlas a la práctica para mantenerse motivado. ¡Pero sea realista! No haga cosas que estén demasiado por encima de su nivel o que sabe que nunca logrará. Escríbalas y recuerde revisar la lista con regularidad a medida que vaya mejorado su condición física.
  7. Recuerde darse una recompensa.
    Podría estar corriendo un kilómetro de más o controlando un par de kilos extra, según alcanza sus metas personales y se siente satisfecho con su rendimiento, dése una recompensa. Podría darse un día de descanso o comprar un nuevo par de pantalones vaqueros. Siéntase orgulloso de sí mismo.
Recuerde siempre la sensación que tiene después de hacer ejercicio, las endorfinas pululando por su organismo, se siente saludable y contento consigo mismo. La próxima vez que esté pensando en saltarse una sesión, recuerde esta sensación y ¡póngase en marcha!

Coma bien, duerma mejor
Conseguir una noche de buen sueño debería ser una de las cosas más fáciles y naturales de hacer. Pero una vida ocupada con una jornada ajetreada nos hacen menos propensos a comer de forma correcta y los malos hábitos alimenticios pueden impedirnos conseguir sueño de buena calidad.
Luigi Gratton comparte sus consejos para una buena nutrición y una noche de buen sueño.
"Cuando llevamos un estilo de vida ocupado, tendemos a comer menos de lo que deberíamos durante el día y por la noche, más de lo que necesitamos, y esto es exactamente lo contrario de lo que debemos hacer", explica Luigi Gratton, Vicepresidente de Educación en Nutrición.
Gratton sugiere concienciarnos sobre cómo ciertos alimentos pueden afectar a nuestro patrón de sueño. Los alimentos pesados ricos en proteínas ​​estimulan la producción de sustancias químicas en el cerebro y esto hace que nos mantengamos alerta. Las grandes raciones de comida ingeridas justo antes de acostarse pueden conducir a la indigestión y a la acidez estomacal, una combinación perfecta para estar despierto toda la noche.

Las comidas bajas en grasa y con alto contenido en carbohidratos se digieren más rápidamente y estimulan la producción de diferentes productos químicos del cerebro que ayudan a la relajación, algo fundamental para facilitar el sueño. Así que lo mejor es optar por un desayuno y comida ricos en proteínas para mantenerse alerta y despierto durante el día, y guardar los carbohidratos para la cena.
Si es usted como la mayoría de la gente, recuerde que la cafeína es un estimulante, por lo que tomar una taza de café antes de ir a la cama no es probablemente lo más prudente. Tanto la cafeína como el alcohol pueden alterar los patrones normales del sueño, es posible que pueda conciliar el sueño pero no lo haría por mucho tiempo. Le resultaría difícil llegar al sueño profundo y a las etapas de sueño reparador, y aún durmiendo un total de ocho horas, podría sentirse débil por la mañana. También está la posibilidad de que el sueño le sea interrumpido por la sensación de vejiga llena, ya que tanto la cafeína como el alcohol actúan como diuréticos.
El picar o no antes de ir a la cama dependerá de sus hábitos. Si cena pronto y su cena es pequeña y ligera, un aperitivo ligero está bien si piensa que le ayudará a dormir, y si puede permitirse esas calorías extra. Los alimentos ricos en calcio como la leche y el yogur son buenas opciones ya que el calcio ayuda en la relajación de los músculos.
Una buena nutrición para una buena noche de Zzz:
  • Tome una cena ligera a base de ensaladas, verduras, fruta, granos enteros y judías
  • Un tazón de lentejas con una ensalada y algo de fruta de postre
  • Si sabe que la cafeína le afecta al sueño, evite las bebidas con cafeína 6-8 horas antes de irse a la cama
  • Mantenga su ingesta de alcohol moderada para evitar la interrupción del sueño
  • Beba la mayor cantidad de líquidos durante el día y redúzcalo después de cenar. Si necesita tomar medicamentos antes de acostarse, utilice una pequeña cantidad de agua
  • Si desea picar algo antes de acostarse, tome alimentos ricos en calcio para ayudar a la relajación muscular
  • Una taza de leche caliente es un antiguo remedio para el insomnio, y por muy buenas razones.